1966 Rolls-Royce Silver Cloud III

1966 Rolls-Royce Silver Cloud III

El Silver Cloud III apareció en 1962 como fruto de los diferentes cambios efectuados sobre el Silver Cloud II. Se distingue de los predecesores por la adición de cuatro focos redondos delanteros dobles rectangulares, más otros dos auxiliares. Para aumentar la visibilidad hacia adelante, el radiador se bajó ligeramente, lo que le dio al capó una línea más rebajada y unas aletas más altas. A pesar de estos cambios, el Silver Cloud III parecía tan ‘Rolls-Royce’ como sus predecesores.

Este modelo puso fin a una era, y a una manera de construir automóviles, basada en el carrozado de los bastidores fabricados por la firma en su fábrica. Las series previas se dotaron de motores evolucionados mientras la carrocería, los interiores y el bastidor eran completamente nuevos. La creciente competencia obligó a Rolls Royce a reconsiderar su política de diseño conservadora. Con el modelo Silver Cloud II presentado en 1959, el principal cambio fue el motor de ocho cilindros en V.  Se ofrecían dos longitudes de bastidor, normal y alargada, con carrocerías cerradas, coupés de dos puertas y convertibles de dos y cuatro puertas. En las instalaciones de Crewe se carrozaban los modelos de serie mientras que las versiones más grandes y lujosas como el exclusivo modelo Phantom V eran carrozados en las instalaciones de carroceros que formaban parte de la marca, como H.J. MUlliner o Park Ward, o por otros independientes de gran prestigio como James Young. La subsidiaria Bentley ofrecía los mismos modelos S3 y otra opción más deportiva, el S3 Continental, salvo el Phantom IV, que sólo se comercializaba como Rolls-Royce.

Por su parte, Bentley ofrecía los mismos modelos fabricados por Rolls Royce, conocidos como S3 o el más deportivo S3 Continental, salvo el Phantom V que sólo se comercializaba como Rolls Royce.

La historia de Rolls-Royce ha destacado por su enfoque en la artesanía impecable y la calidad superior. Mientras que otras marcas priorizaban la innovación tecnológica y la producción en masa, Rolls-Royce se mantenía fiel a su tradición de lujo y elegancia. Sus coches estaban hechos a mano con los mejores materiales y un estilo clásico y refinado que los diferenciaba de las tendencias más modernas de la época.

Técnicamente, el Silver Cloud III se había quedado desfasado frente a las prestaciones superiores y más económicas de la competencia, tales como las carrocerías monocasco, frenos de disco o suspensiones independientes. Para ponerse al mismo nivel técnico de su competencia, la marca actualizó su gama de modelos con la presentación en 1965 del Silver Shadow, uno de los modelos más longevos de Rolls-Royce al fabricarse hasta 1981 con un éxito avalado por los más de 30.000 ejemplares vendidos, frente a las 2.000 unidades del Silver Cloud III.

  • Chasis: SGT103
  • Carrocería: Rolls-Royce
  • Motor: V8/ 6230 cc
  • Velocidad Punta: 188 kmh
  • Producción: 2.809 uds
  • Período: 1962-1966

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